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              Volver Menú Infonautic | 
           
          
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              "Cruzar el 
              Atlántico" - Como afrontar la navegación oceánica 
              
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            Cruzar el Atlántico 
            en un crucero de recreo significa navegar ininterrumpidamente en 
            mitad del mar durante 4 ó 5 semanas sin la menor posibilidad de 
            acceder a puerto alguno. 
            Hay que estar 
            preparado para ello y navegar en un barco que pueda soportar 
            cualquier situación imprevista.
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                  El 
                  avance más importante y relevante para la navegación es sin 
                  lugar a dudas la invención del GPS. Hace sólo un par de 
                  décadas era necesario recurrir al sextante para sacar la 
                  posición, lo cuál debemos recordar, era imposible con el cielo 
                  cubierto o excesiva nubosidad. Es cierto que existían otros 
                  sistemas conocidos como el Loran,  | 
                 
               
              
             
            
            
            
                  o el 
            Omega, que  
            
                  
            triangulaban la posición del barco mediante señales de radio. Estos 
            sistemas eran 
            muy caros y 
            funcionaban de forma  inexacta e imprecisa. Recuerdo haber 
            manejado un Loran C hace una veintena de años y dejar de utilizarlo 
            pues según el aparato nos encontrábamos a medianoche ¡justo en mitad 
            de la isla de Mallorca!  
            
            
            En los últimos 
            años todo ha cambiado una locura con las pantallas chartploter. Al pulsar un botón sabemos de 
            forma casi instantánea y con exactitud de pocos metros, nuestra 
            situación exacta. Y esto en todo momento, día y noche y con 
            independencia de si hace sol o estamos en mitad de una tormenta. 
            Conoceremos nuestro rumbo, nuestra velocidad, la distancia 
            recorrida, las millas que faltan a nuestro destino y hasta las 
            corrientes gracias al cálculo diferencial entre los datos del GPS y 
            los datos de la corredera. Y todo ello mostrado en una pantalla en 
            la que aparece la cartografía con batimetrías y la ruta trazada… ¡En 
            apenas dos décadas! 
            
              
            
            
            
              
            
            . 
            
            Aún puede 
            resultar más desconcertante que todo esto lo tengamos en un 
            dispositivo a veces tan pequeño como un paquete de tabaco y que 
            consume sólo unos miliamperios o en el teléfono movil... Imposible 
            de predecir. 
            
            Y además son tan baratos que por lo que 
            cuesta una cena, nos podremos comprar uno de 
            reserva. Por ello, en una travesía Atlántica, lo suyo es llevar el chartploter y un par de GPS de mano de reserva, que con pilas nuevas 
            siempre funcionarán, aunque caiga un rayo en el barco que deje 
            'frito' toda la electrónica abordo. 
            
            Recuerde que 
            lo importante de un chartplotter es que sea robusto y fácil de 
            utilizar. De nada nos valdrán cien virguerías si para utilizarlas 
            tenemos que acudir al manual de usuario. Es mucho mejor un equipo 
            sencillo e intuitivo que no falle nunca. En este sentido elija uno 
            de pantalla grande en la que los detalles de la cartografía digital 
            se vean con facilidad y bajo todo tipo de iluminación. Este aspecto 
            es sumamente importante si vamos a instalar la pantalla en el 
            exterior, pues hay algunos modelos que resultan muy difíciles de ver 
            a plena luz del sol. Los botones que permitan elegir las opciones 
            deben ser grandes y suficientemente espaciados…. Recuerde que en 
            ocasiones tendrá que manejarlo con gruesos guantes y la manos 
            adormiladas por el frío. 
            
              
            
            
              
            
            Algunos 
            modelos ofrecen algo conocido como “funcionamiento DR”. En este modo 
            el chartplotter calcula la posición del barco a partir del último 
            rumbo y la velocidad real sobre el terreno (Speed Made Good) para 
            presuponer en donde estamos, efectuando una navegación a la estima. 
            Esto es útil en caso de perderse la señal del satélite y lo que es 
            imperativo es que en la pantalla aparezca un símbolo claro indicando 
            que en este momento la posición del barco es estimada y no exacta.
             
            
            Cuando navegue 
            por mares, y sobretodo por costas lejanas, recuerde que el GPS 
            efectivamente nos estará dando con una precisión brutal nuestra 
            posición exacta, lo cual no quiere decir que coincida con lo que 
            vemos en la cartografía digital pues hay muchas cartas digitalizadas 
            a partir de datos que no son exactos. Las cartas Navionics de 
            Baleares están ya muy revisadas y por tanto son muy fiables, y a 
            pesar de ello hemos “cazado” algunas rocas mal vectorizadas, por 
            ejemplo en la costa Oeste de Ibiza. Imagine lo que puede ser navegar 
            por un islote perdido en las costas de Papua… Aprovéchese del 
            Chartplotter, "pero no se fíe ni de su padre…" 
            
              
            
              
            
            
            Mucho más que 
            la posición 
            
              
            
              
            
            El GPS ha 
            hecho evidente para cualquier novato una parte importante de los conocimientos de los  antiguos 
            y curtidos capitanes. Pero para navegar a vela hay que conocer muchas 
            otras técnicas para llegar a ser autosuficientes en mitad del 
            océano.  
            
            Hablamos de la navegación en sí, de saber manejar el barco y 
            conocer la forma en que se triman las velas, de entender de 
            mecánica, pues tendremos que enfrentarnos con arreglos de 
            emergencia, y tener conocimientos de meteorología, pues a pesar de 
            disponer de equipos de comunicaciones con los que podremos recibir 
            la meteo, hay que saber como actuar cuando cambia el viento y la 
            meteorología. Es necesario saber como afrontar las guardias de 
            noche, y como organizar la preparación de la comidas e incluso 
            pensar en cómo aprovechar el tiempo libre.  
            
              
            
              
              
                
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                  Algunos "trucos" 
                  
                  
                  Cuando navegamos hace ya años por el Caribe, nuestro barco no 
                  equipaba ninguna pantalla ChartPloter pues aún eran caras. Llevábamos un Garmin con cartografía general, 
                  y durante el día siempre estaba apagado. Utilizábamos tan solo 
                  la bitácora para seguir nuestro rumbo efectivo.  
            
            
            Con el fin de no consumir baterías, sólo lo utilizábamos algunas 
            veces por la noche, para ello utilizábamos un cargador de doce 
            voltios de pilas recargables, si el motor no se ponía teníamos un 
            pequeño problema, pues no podíamos recargar, al pasar la mayor parte 
            de la travesía roto, era lo habitual, pero lo suplíamos con el 
            generador eólico si teníamos viento, en ocasiones en 24 horas con 
            unos 15 nudos de viento, era capaz de cargar las 3 baterías de 65 
            amperios. 
            
            
            Los verdaderos problemas con este GPS se producen con una 
            cartografía que es prácticamente inexistente en la costa brasileña, 
            y especialmente en la subida del Amazonas. Llegábamos a los destinos 
            al anochecer y no veíamos absolutamente nada. En muchas ocasiones 
            nos guiábamos por los way-points de otros navegantes que nos lo 
            facilitaron través de la radio blu, o como en la mayoría de los 
            casos con mil ojos y un millón de sustos cada minuto, especialmente 
            cuando las noches eran muy cerradas. 
            
              
            
              
            
              
            
            
            La navegación nocturna en el Amazonas era realmente complicada, 
            mucho más que en el mar, con continuos cambios de  corriente de 
            hasta 5 nudos cada seis horas, por lo que hacíamos lo imposible por 
            pasar las noches fondeados. 
            
            
            Algún susto terrible nos dimos cuando el motor dejo de funcionar en 
            mitad de la noche, mientras intentábamos salir de un río a otro, sin 
            absolutamente nada de viento, estábamos a merced de las corrientes, 
            realmente preocupados por la gran posibilidad de encallar o 
            enredarnos en un margen de un río donde jamás nadie nos encontraría! 
            
            
            Las cartas náuticas de papel las pudimos conseguir en el ejercito  
            en la ciudad de Belén. Sin ellas no habríamos podido nunca encontrar 
            la salida de la desembocadura. ¡Es imposible! 
            
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            Las cartas y la mesa 
            de cartas 
            
              
            
            La mesa de 
            cartas ideal es aquella que nos deja el suficiente espacio para 
            trabajar y extender las cartas con diferentes huecos para guardar 
            reglas, compases, lapiceros y otros pequeños objetos. Debe estar 
            situada cerca de la salida pero sin peligro de que pueda mojarse por 
            culpa del mal tiempo. Durante la noche necesitaremos una pequeña luz 
            roja, que además de dejarnos ver no molestará a nuestra visión 
            nocturna ni a los compañeros que pudieran estar dormidos cerca.
             
            
            Además del 
            chartplotter es más que aconsejable llevar algunas cartas en papel 
            así como guías náuticas de las zonas por la que vayamos a navegar. 
            Lo ideal es llevar algunas cartas de todo el Atlántico en escalas 
            grandes y algunas más detalladas de los sitios en donde tengamos 
            pensado recalar. Es imposible llevar cartas de todas partes en 
            papel, ya que además de costar una fortuna, tendría que estibar un 
            montón de kilos de papel.  
            
            Debemos pasar 
            nuestra posición a la carta de papel pues el chartplotter puede 
            fallar y en ese caso el GPS de mano junto con la carta de papel nos 
            serán fundamentales, Para almacenar las cartas de papel, lo peor es 
            el tubo de cartón ya que cuando queramos utilizarlas, estas se 
            enrollarán sobre sí mismas, lo cual acabará con los nervios de 
            cualquiera. Es mucho mejor doblarlas por la mitad y ponerlas en una 
            gran carpeta debajo de cualquier cama o litera. Las que están 
            digitalizadas en CD-Rom o vienen con programas como el Max-Sea tiene 
            la gran ventaja de no ocupar espacio ni peso, pero a pesar de todo, 
            piense en llevar algunas en papel, aunque sean de escala grande.
             
            
            
            En la mesa de 
            cartas también podremos llevar el libro de bitácora en el que 
            apuntar un resumen de todo lo que acontece. Además de resultar un 
            buen recuerdo para el futuro nos puede valer para apuntar datos que 
            consideremos importantes o relevantes de nuestra navegación, además 
            de ser un requisito legal necesario en toda navegación. En caso de 
            siniestro el seguro náutico puede exigirlo para contrastar la 
            veracidad de lo acaecido. No hace falta que escribamos como Miguel 
            de Cervantes. Basta con apuntar los datos y las informaciones más 
            relevantes de cada día. Debemos apuntar la hora, el rumbo de nuestra 
            navegación, las millas recorridas, la posición GPS, la dirección y 
            fuerza del viento, la presión barométrica, litros de agua dulce que 
            nos quedan en los depósitos, horas de motor y el combustible que nos 
            queda si no hay viento y vamos a motor, además de los hechos que 
            consideremos importantes. Al menos debemos escribir una vez al día o 
            mejor en la mañana y antes del atardecer, y naturalmente cada vez 
            que se produzca un cambio significativo en nuestra navegación, como 
            por ejemplo cambios de velas, encuentros con arrecifes, navegación 
            con cetáceos, … Lo bonito es utilizar el libro de bitácora para 
            apuntar también un breve resumen del día navegado, las vivencias de 
            la tripulación, reflexiones personales o lo que más nos apetezca 
            recordar.  
            
              
            
              
            
            
            Las cartas del almirantazgo británicas puede buscarse en
            
            www.nmwebsearch.com 
            
              
            
              
            
            
            El compás de 
            navegación y otros instrumentos 
            
            En la era del 
            GPS el compás parece un instrumento de otras épocas y bien es cierto 
            que en navegación costera a veces ni se destapan sus protectores de 
            plástico. Pero en navegación oceánica durante el cruce del Atlántico 
            debemos utilizarlo y comparar su rumbo con el de los sistemas 
            electrónicos que llevemos a bordo. Recuerde que la caída de un rayo 
            cerca del barco puede alterar su funcionamiento y por tanto no es 
            mala idea llevar otro compás de marcaciones para poder verificar su 
            buen funcionamiento. En barcos fabricados en acero o ferro-cemento, 
            los ajustes del compás se complican, pero en la inmensa mayoría de 
            barcos de recreo esto no tiene importancia al estar fabricados en 
            fibra de vidrio y poliester. 
            
              
            
              
            
              
            
            El barómetro 
            es otro instrumento del que no debemos prescindir. Es cierto que en 
            esta época de telecomunicaciones nos pueden pasar la meteo por el 
            teléfono satelital o por onda corta, o wheather-fax, pero el 
            barómetro nos permitirá hacer nuestras propias predicciones locales 
            y comprobar de primera mano lo que se pueda “cocer” en el ambiente. 
            El barógrafo es interesante pero tan molesto de llevar como 
            decorativo. Es mejor idea el utilizar un barógrafo digital 
            conectando un medidor al PC. De esta manera podremos registrar de 
            forma continua las medidas de presión y analizar las previsiones con 
            comodidad. Además los barógrafos mecánicos de toda la vida no van 
            nada bien con los vaivenes de un velero y pueden distorsionar las 
            rayas pintadas con cada pantocazo.  
            
            El termómetro 
            de medición del agua en superficie no es para saber si la 
            temperatura del Atlántico está “rica” para pegarse un bañito, como 
            podría pensar la mayoría de la gente de primeras dadas. El verdadero 
            motivo de medir la temperatura del agua es poder descubrir las 
            corrientes oceánicas en donde el agua cambia bruscamente de 
            temperatura, como por ejemplo en la famosa corriente del golfo.
             
            
              
            
              
            
            La distancia 
            ortodrómica 
            
              
            
            Cuando hacemos 
            navegación oceánica con destinos situados a miles de millas de 
            distancia, el recorrido más corto entre dos puntos del mapa ¡deja de 
            ser la línea recta que pintamos en él! Así es pues vivimos en un 
            mundo esférico en el que la distancia más corta no es una recta sino 
            un gran arco de circunferencia sobre la superficie del planeta. La 
            proyección mercator de las cartas no permite representar esta 
            curvatura del planeta y por tanto si vamos desde un punto a otro 
            siguiendo siempre el rumbo dado en la carta, estaremos recorriendo 
            distancias mayores a la necesaria. 
            
            
            En la práctica 
            lo suyo es seguir la ruta lexodrómica guiados por el compás pues 
            salvo en latitudes muy altas o bajas, la diferencia no es demasiado 
            importante. Pero si tiene pensado cruzar el Atlántico desde el Norte 
            de Europa hasta el norte de Estados Unidos, tenga mucho respeto a 
            este importante asunto a no ser que quiera perder cientos de millas 
            y días enteros de navegación innecesaria. Lo importante a retener es 
            que la mayoría de los ChartPlotters actuales le guiarán por la 
            ortodrómica. Una razón más para dejarse ayudar por la tecnología.
             
            
              
            
              
            
              
            
            
            
            El gran inconveniente de la ortodrómica es que presenta un ángulo 
            diferente al cortar a cada meridiano, excepto cuando dicha ruta 
            coincide con un meridiano o con el Ecuador. 
            
            
              
            
              
                
                
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            -
            
            Vientos Alisios      
            
            
                  
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            KYO; el Atlántico a vela
            
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            oceánico?
              
              
             
                  
                
            
              
              
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