e-Magazine       Home         

Art. Barcos

Catálogo Boats

Ocasión

Financiación

Seguros

Megayates

InfoNáutic

Charter

Empresas

Motos Agua

Tienda

Eco-Náutica

Noticias

Regatas

Tablón

Club Fondear

     
     
     
     
     
     
     
     
     
     
     
     
     
     
     
     
     
     
     
     
     
     
     
     
     
     
     
     
     
     
     
     
     
     
     
     
     
     
     
     
     
     
     
     
     
     
     
     
     
     
     
     
     
     
     
     

 

   Volver Menú Infonautic

 

 

 
 
 

     
 

Reparar el timón de un barco

 

 

Al navegar muy cerca de costa corremos el riesgo de chocar contra alguna roca del fondo.

 

En los veleros el golpe deformar o romper el timón y con mala suerte el impacto puede dañarlo muy seriamente... ¿Cómo arreglarlo?

Al maniobrar en aguas muy someras y con rocas podemos impactar con alguna roca. Si el golpe se lo lleva la quilla de acero navegando a 2 nudos, el impacto detendrá el velero en seco, rayando el bulbo y con suerte todo quedará en un susto.

 

Pero si el impacto es a más velocidad y golpea el timón, la avería está asegurada. En este caso podemos romper parte de la pala o arrancar una zona entera de él. El caso más grave ocurrirá cuando el impacto sea tan fuerte que además de romper la pala, se desgarre o arranque el casquillo en el que gira y que soporta la mecha del timón. En este caso se originará una vía de agua con fuerte caudal que puede llegar a ser insostenible.

De hecho, así han naufragado varios veleros, uno de ellos en mitad del Océano Atlántico al chocar el timón con un gran cetáceo o un contenedor flotando entre dos aguas, dando al navegante solitario pocos minutos, a pesar de emplearse a fondo con las bombas de achique. Un tiempo precioso para avisar por radio BLU de la desesperada situación.  El tiempo es muy justo y hay que lanzar la balsa, coger garrafas de agua y recoger algunos pertrechos.

 

 

 

 

Sacar el timón del barco

Pero en la mayoría de las ocasiones, los golpes en los timones requerirán una reparación del timón sin que por ello hayamos estado a punto de naufragar. Cuando la reparación es significativa dado la fuerza del impacto, debemos sacar el timón del barco y repararlo en el taller.

Con un fuerte impacto, sacar el timón es también conveniente pues es bueno comprobar si se han visto afectados los cojinetes cónicos en los que reposa la mecha y gracias a los cuales el timón gira con suavidad sobre su eje.

Para sacar el timón del barco debemos desmontar los guardines, las bieletas y retirar el sector circular sobre el que los cables tiran del timón para hacerlo girar. Ahora le toca el turno a la grúa y travel-lift que debe subir el barco para dejar el espacio necesario, para que pueda salir la mecha del timón. Si puede y el terreno es blando, otra solución para evitar el uso de la grúa es cavar un pequeño hueco debajo del timón para que este pueda bajar dentro de él y quede libre fuera del barco.

Con el timón ya fuera, debemos sacar los casquillos y rodamientos para comprobar con atención si han sufrido y por tanto hubieran de ser sustituidos. En este caso con el rodamiento en la mano, debemos tomar las medidas o mejor aún ir directamente a una tienda en la que vendan todo tipo de rodamientos para conseguir unos iguales.

 

Reparar el timón

El caso que nos ocupa es el de un velero de 50 pies cuyo timón golpeo una roca que le arrancó de cuajo la parte inferior desgarrando la zona de la rotura en una longitud de unos 20 x 15 centímetro. Esto dejó al descubierto la espuma interior con fibras fracturadas.

El primer trabajo consiste en lijar y eliminar la rotura con una pequeña amoladora de 600 watios equipada con un disco de lija del tipo “mil-hojas” de grano muy grueso del nº 40, para eliminar todas las barbas y partes fracturadas. La operación puede ser realizada antes del sacar el timón del barco pues el propio velero nos hace las veces de soporte rígido. Entonces le toca el turno al travel-lift que elevará el barco más de un metro para dar salida a toda la mecha del timón. Con el timón ya libre entraremos en el taller para comenzar el arreglo.

Como es lógico, apreciamos que el timón está totalmente empapado en su interior de agua salada y por ello decidimos eliminar un poco más la fibra alrededor de la zona afectada, con la intención de asegurar la eliminación de las fibras dañadas y permitir una mejor aireación del interior. La zona afectada es más amplia de la que en un principio pudiera parecer. Lo limpiamos concienzudamente con agua dulce a presión y dejamos secar el timón en posición vertical durante varios días. 

 

 

 

Las herramientas y el material a utilizar

 

 

Necesitaremos una pequeña radial o amoladora equipada un con disco de lija de grueso gramaje, una lijadora orbital para el acabado del trabajo y todo el material de reparación formado por diferentes tejidos, así como resinas y gelcoats. 

Para reformar la pieza vamos a utilizar resina epoxi internacional (epiglass), masilla epoxi, tejido de vidrio en “mat” de 300g, y tejido roving 600 gramos/m2, además de aerosil, imprimación de tipo (interprime 820) y finalmente antifouling (micron 77).

 

 

 

 

Comienza el trabajo

Los que no lo hayan probado, deben hacerlo cuanto antes, pues les espera una ¡grata sorpresa! Una pequeña radial equipada con un disco de lija para metal o inox, de los que están formados por numerosos fragmentos de papel de lija apaisados unos sobre otros como si fueran “coches aparcados en batería”, es sorprendentemente efectivo. Algunos los conocen como discos “mil-hojas”, y los hay de diferentes gramajes en cualquier centro comercial o ferretería industrial. La amoladora equipada con este tipo de discos “come” mucho y lograremos un trabajo controlado y efectivo.

Es muy importante protegerse adecuadamente con una buena máscara de respiración y gafas de protección. Los cascos auditivos tampoco están de más, pero la máscara de filtro y las gafas son absolutamente imprescindibles. Andarse con pereza en este aspecto es jugar de forma muy peligrosa con la salud. Sin perezas en equiparse adecuadamente, pues el resultado de respirar polvo de fibra de vidrio es sumamente dañino para el sistema respiratorio. Se arrepentirá si no lo tiene en cuenta.

Una vez finalizado el trabajo de devastado grueso, debemos lijar los laterales con una orbital y discos de lija grano 60 que irá preparando el terreno para comenzar con el arreglo en sí.

 

La reconstrucción del timón

Hay que reconstruir la zona que falta mediante un núcleo de espuma de polietileno que encaje en la rotura y tenga la forma del fragmento de timón perdido. Procedemos a reconstruir primero un lateral aplicando varias capas intercaladas de mat y de tejido rovin biaxial. Luego pasaremos a la otra cara del timón haciendo el mismo trabajo.

Las últimas capas van montando poco a poco sobre la zona saneada del timón de modo que el resultado sea una pieza monolítica y totalmente unida a la parte no dañada del timón. Para ello es importante haber rebajado un poco la zona en donde montan los tejidos para que no se produzcan sobre-espesores indeseados. La zona en la que deben montar las capas de fibra dependerá de la importancia de la rotura. Como se aprecia en las fotos, en nuestro caso la obra de reparación monta capa a capa sobre el timón debastado unos 25 centímetros para asegurar una total unión de la reparación con el timón.

Entre capa y capa dejamos secar la resina epoxy unas 6 horas. Es el tiempo que estable el fabricante “Internacional” al estar acelerada en su polimerización frente las 12 horas que normalmente habría que esperar entre capa y capa. De esta manera podremos dar 4 capas en dos días consecutivos. La parte delantera del timón quedará reforzada con dos capas más de tejido de roving y finalizaremos esta etapa de la reparación con una capa de resina epoxi sobre todo el timón con el objetivo de sellar posibles poros.

El siguiente paso conseguirá refinar el trabajo y lograr una superficie lisa uniforme mediante la aplicación de varias capas de masilla epoxi entre las cuales realizaremos sucesivos lijados con la lijadora orbital. En esta fase del trabajo debemos lijar todo el timón y no sólo la reparación mediante discos de lija de grano 220, eliminando todo el viejo antifouling.

Vamos trabajando simultáneamente las dos caras del timón para conseguir un resultado totalmente simétrico y homogéneo. Luego pasaremos a grano 320 algo más fino dejando todo el timón listo para dar la capa de imprimación epoxi que dará soporte a la pintura final. En nuestro caso hemos utilizado una pintura de alta resistencia de International llamada “micrón 77”.

Cuando montamos el timón ya perfectamente seco y listo no olvidaremos sustituir los dos casquillos y rodamientos si viéramos que están “tocados”. Así conseguiremos que el timón vaya muy suave quedando el resultado como nuevo.

 

Para mas información:

 

NovaBoats

 

Tf: 607 99 9090

email

 

    Artículos relacionados:

      - Destrozar un cata por dormirse y cómo recuperarlo totalmente

      - Repara tu barco con NovaBoats

      - Renovar un casco en profundidad

      - Repárate el timón del barco

      - El timón

      - El antifouling

      - Antifouling al mejor precio

      - Mantenimiento de cascos de fibra

      - Antiincrustantes en la obra viva

 


 

 

 

 

 

Tel: +34 91-6319190        info@fondear.com 


© Copyright Fondear, S.L.