quedarse corto en potencia, pues un barco sub-motorizado, es desagradable y puede resultar hasta peligroso dependiendo de las condiciones meteorológicas y de la mar. Nuestra duda era si elegir un solo motor o dos motores.

Con el incremento de potencia de los motores fuerbabordas que llegan ahora a tener más de 400 cv, la motorización mediante fuerabordas es adecuada incluso para lanchas rápidas F1, históricamente equipadas con intrabordas de más de 1.000 cv. Existen nuevos modelos de barcos de altas prestaciones que montan hasta 4 motores de 400 cv. En este caso no hay lugar a dudas, pues para alcanzar tales potencias es necesario montar varios motores en la bancada de popa.

Pero si estamos escogiendo motorización para una lancha de eslora mediana y de potencia entre los 150 y 400 caballos en total, nos surgirá la duda entre elegir un solo motor o dos motores más pequeños. La respuesta tiene muchas vertientes, como muestra la disparidad de soluciones adoptadas por diferentes armadores. Es normal cuando estás dando un paseo por una marina encontrar una motora equipada con doble fueraborda, y unos metros más adelante en el mismo pantalán, encontrarnos con el mismo modelo, pero esta vez motorizado por un solo motor de tanta potencia como los otros dos.

1.- El precio

Vaya por delante que siempre es más caro montar dos motores que uno solo que sume la potencia de los dos. Naturalmente depende de las marcas, políticas comerciales y los descuentos que podamos conseguir, pero por ejemplo un 150 cv típico puede estar en torno a los 15.000€ mientras que un 300 cv estará en torno a los 26.000€.

Además con la doble motorización tendremos un coste de instalación más caro, pues de media, montar una sistema de dirección con todos sus accesorios para un 300 cv puede estar en torno a los 3.000 € en materiales y mano de obra, mientras que montar la dirección pero para dos fuerabordas puede subir a unos 5.000€. Al final contando todo, la solución de doble motor puede costar del orden de cinco o seis mil euros más.

Pero en el capítulo de precios aún no hemos acabado, pues aunque el mantenimiento de un 150 cv sea ligeramente más barato que el de un 300 cv, estos precios no son tan diferentes t están en el orden de unos 1.000€ al año. Por tanto para dos motores tendremos que contar con 2.000€. De nuevo la diferencia económica se incrementa, resultando más económico motorizar un único motor.

2.- Consumos

Hablamos de consumos a máxima potencia y pleno gas. Los que los anglosajones llaman “Full Throttle”. Debemos recordar que a cruceros moderados estos consumos suelen bajar a un tercio de estas cifras.

Para el caso de los dos motores de 150 cv los consumos se irían a plena potencia a 2 x 57 litros/hora o sea 114 litros/hora, mientras que para un 300 cv, los consumos se irían en el entorno de los 100 litros/hora. De nuevo vuelve a ser más razonable montar un único motor de gran potencia, aunque estas cifras de consumos pueden varias dependiendo del régimen y el crucero al que naveguemos favoreciendo uno u otro caso dependiendo de las condiciones del barco y del mar.

3.- Prestaciones

Con un barco más pesado o si las condiciones típicas de navegación requieren pasar rápidamente del desplazamiento al planeo y otra vez regresar a la navegaciones de desplazamiento, dos hélices y en total 8 cilindros, frente a una sola hélice y típicamente 6 cilindros, aportan más "agarre" en la propulsión, mayor par-motor y tiempos de planeo netamente más cortos. Si por ejemplo fuéramos amantes del sky acuático y además nos gusta sacar a varios esquiadores a la vez, la doble motorización aportará ventajas.

Pero aunque el barco salga más rápido, es más que probable que a igualdad de potencia, un solo motor logre puntas de velocidad más elevadas, pues un solo motor ofrece menores rozamientos hidrodinámicos. Por ejemplo, en el caso de nuestra Cap Camarat de 7,5 metros de eslora, al final se decidió equipar con un único fueraborda Yamaha 350 cv y la velocidad que medidos con un GPS y con el casco perfectamente limpio y recién estrenado, y con el mar como un espejo en la ría de Vigo fue exactamente de 50,0 Nudos, trimando mucho el motor hasta sacar parte de la cola fuera del agua.

4.- Maniobrabilidad

Una doble motorización permite hacer ciaboga y por tanto maniobrar en puerto con una facilidad impresionante. Poder meter un motor avante y otro atrás permite hacer giros imposibles si solo tenemos un solo motor.

Si además instalamos el sistema de joystick de dirección, las maniobras portuarias se conviertan en un juego de niños, al permitir que el barco "‘baile" a nuestro antojo de la forma más fácil y sencilla, con movimientos de giros y traslaciones, casi imposibles de conseguir con un solo motor. El sistema de Joystick permite que cada motor pueda girar de forma independiente. Así un motor puede empujar avante con la cola a babor mientras que el otro gira atras hacia estribor. Dependiente de estas combinaciones y la dosificación de la potencia, el joystick traduce las intenciones del capitán en ajustes que permiten controlar el barco de una forma increíblemente fácil.

5.- Peso

Todas las prestaciones de una motora mejorarán al reducir el peso total de la embarcación. Pero ojo, si por diseño el barco está pensado para que la popa tenga un peso determinado, no es bueno poner de menos, pues tendríamos un asiento aproado, y cuando menos tendremos problemas con el vaciado de la bañera.

En el ejemplo descrito vimos en un puerto gallego una Cap Camarat 755 idéntica, equipada con Evinrude y al ser un motor más ligero, lo cual es excelente, la popa quedaba ligeramente más levantada sobre el asiento horizontal, lo cual hacía que el agua de lluvia se acumulara en la parte delantera de la bañera, encharcando el barco de forma muy incómoda, al no poder ser esta vaciada por los desagües de la bañera situados en el suelo de popa.

Por el contrario, si metemos más peso en popa y el barco queda apopado, podríamos necesitar corregir con flaps so pena de tener un comportamiento en navegación muy molesto y con perdidas de rendimiento así como pérdidas por rozamientos hidrodinámicos debido a los flaps o interceptores.

En nuestro ejemplo, dos fuerabordas de 150 cv pesarán del orden de 2x220 Kilos, mientras que un 300 cv pesa del orden de 255 kilos por tanto hay un ahorro de peso muy importante a favor de montar un solo motor.

6.- Fiabilidad

Llevar dos motores parece en principio más seguro por aquello de si nos falla uno de ellos en la mar… Es cierto que una mecánica siempre se puede romper, pero en los actuales motores, son extremadamente seguras. Además del total de fallos que sufren los sistemas de propulsión, la mayoría provendrán de filtros de gasolina en mal estado, o agua procedente de la condensación en el depósito, o un fallo hidráulico en la dirección. En definitiva problemas que se manifestarían de todas formas con independencia de si motorizamos con uno o más motores.

Pero es cierto, al fin y al cabo, que llevar dos motores aumenta la fiabilidad, pues en caso de un improbable fallo mecánico siempre tendremos el segundo motor. Es fácil que un fallo mecánico es enredar la hélice en un cabo o una red de pesca dejada a la deriva, y por tanto en este particular, dos motores son mejor que uno.