las Antillas desde noviembre hasta  junio, y luego regresar a España haciendo el cruce del Atlántico por las Azores. ¡Menuda pasada!   Plaza a plaza disponibles para que compartas esta aventura.

Una experiencia única, para conocer y disfrutar el Caribe, de forma muy asequible, compartiendo un Catana 431 de altas prestaciones y confort. Una aventura muy distinta a la que estamos acostumbrados en otros barcos, por comodidad, habitabilidad, prestaciones y sobre todo destinos... Si quieres adquirir experiencia navegando en un Catamarán mientras disfrutas del Caribe, Ultreia ofrece el barco perfecto en estas aguas caribeñas.

Una ocasión única para apuntarte a una o más etapas y vivir una experiencia que atesorarás para siempre, mientras aprendes o mejoras las habilidades marineras, de la mano de nuestro capitán “Jaime de Muller”.

Navegar en el Caribe: “Master Class” con Jaime de Muller

Durante esta temporada Ultreia 2.024, puedes acercarte al Caribe y disfrutar los trópicos en compañía de otros amigos. Ultreia ofrece plaza a plaza, sin necesidad de tener que formar un grupo. Si no tienes con quien compartir la experiencia, o viajas solo con tu pareja, esta temporada tenemos la posibilidad de navegar por las Antillas de Barlovento, eligiendo las fechas que mejor se amolden con de los destinos que Ultreia propone.

Mientras navegamos, podemos aprender las técnicas propias de un Catamarán de alto rendimiento con orzas, descubriendo los secretos de la navegación que explica “Jaime de Muller”, mientras disfrutamos este fantástico mar tropical, sus distintas islas, las culturas e historias de sus descubridores. Cientos de rincones, calas, costas y fondeaderos. Diferentes derrotas compartidas con buenos amigos y amantes de mar.

La isla de Trinidad

La isla a la que Cristóbal Colón llamó Trinidad en 1.498, forma parte de la República de Trinidad & Tobago, y gracias al petróleo tiene la tercera renta per cápita más alta de América después de EEUU y Canadá. Trinidad fue española hasta 1.797 que se la entregamos a los Británicos, no así Tobago, que pasó de mano en mano por distintos países, como si fuera un cromo del colegio...

Ultreia ya nos espera en Trinidad, donde ha descansado en marina seca durante el verano 2.023, para recibir los últimos cuidados con los que comenzar la temporada 2.024 en plena forma. Nuevos Daggerboards, revisión de jarcia y plano vélico formado por Génova, Código cero, Mayor Full Batten y Spi. Nueva auxiliar Highfield con suelo de aluminio para recorrer los rincones más recónditos, nuevo fueraborda, nuevos equipos de comunicación,… un compañero perfecto.

Trinidad es la isla más al sur de las Antillas menores de Barlovento. Al ser la más distante de la trayectoria de los terribles huracanes que azotan el mar Caribe en la época estival, es muy utilizada para la varada de los barcos de recreo. Se encuentra tan al sur, que sólo la separa de Venezuela el golfo de Paria, y 11 kilómetros de la costa de Venezuela, donde desemboca el impresionante río Orinoco.

Granada y Tobago forman parte de las Antillas menores más cercanas. Tobago no tiene muy buenos fondeaderos por lo que no es tan visitada como Granada, auténtico paraíso para navegar a vela e ir de cala en cala disfrutando de sus playas de ensueño en las que nadas, bucear, o simplemente descansar.

La República de Trinidad y Tobago viven  un poco del turismo y mucho del petróleo, y por ello existen gran cantidad de plataformas petrolíferas (oil rigs) alejadas de la costa en las cercanías del golfo de Paria. Desde el punto de vista turístico, el país no tiene el tirón de otras islas del Caribe, aunque es muy selvática y hermosa. Por múltiples razones, las compañías aseguradoras las consideran seguras para dejar el barco durante la temporada de huracanes, y por ello son cada vez son más populares entre los armadores que quieren guardar su barco en seco durante la época de lluvias. Pasado el otoño, toca el turno de botarlos para emprender una nueva temporada recorriendo las islas sur-norte hasta alcanzar el deseado "Peter end Yacht Club" en las Islas Vírgenes Británicas.

En la costa oeste de Trinidad, y concretamente en Chaguaramas, existen dos grandes varaderos-marina con excelentes servicios técnicos, seguridad y buen precio. Por ello el destino es cada vez más demandado al ser un refugio perfecto al que podemos volar directos desde Londres con vuelos diarios desde Gatwick.

Trinidad y Granadinas; Primeras etapas

Partiremos rumbo norte hacia el sur de la isla de Granada para fondear en la bahía de Prickly Bay en los que podremos pasar unos días antes de comenzar la subida hacia las Islas Granadinas (Tobago Keys). Allí conoceremos otros barcos con planes parecidos, con los que poder navegar en conserva durante las siguientes semanas.

Para cruzar hay que tener en cuenta: las corrientes, el viento, y esquivar las numerosas plataformas petrolíferas, evitando también las aguas cercanas de Venezuela en donde hay piratería debido a la actual pobreza del país. En cuanto a las plataformas petrolíferas, no hay problema pues están perfectamente señalizadas en la cartografía en mitad de los campos de gas "Chaconia, Poinsettia e Hibiscus", y son un auténtico espectáculo por la noche.

Aunque es cierto que en las costas de Venezuela hay piratería, en los últimos 5 años no ha sido reportado ningún incidente. Entre otras cosas por la gran labor de vigilancia que realizan los guardacostas de Trinidad. Antes de partir desde Trinidad reportamos a las autoridades nuestras intenciones, incluida la hora de salida, destino y tripulación, pudiendo enviar toda la documentación incluso por WhatsApp. Con ello los guardacostas de Trinidad nos hacen, a través del AIS, un seguimiento durante toda la travesía, a pesar de lo cual debemos notificar nuestra llegada para cerrar el seguimiento sin incidentes.

Las corrientes en esta zona son fuertes, con hasta 3 nudos de intensidad en algunos sitios y siempre del Este o Sureste, formando parte de la corriente atlántica ecuatorial del Norte. En la época del imperio Español esta travesía entre islas era conocida como el “Paso de los Galeones”, pues se aprovechaba esta corriente para navegar hasta el puerto de Cartagena de Indias. Por ello la isla de Tobago se convirtió en un lugar estratégico de control y de paso, desde centro América hacia las Antillas mayores. Cuando naveguemos atravesando el paso hacia Trinidad recibiremos la corriente por el través de estribor, obligándonos a navegar algunos grados a babor para contrarrestar la deriva.

El viento es más fácil de controlar, pues en todas las “West Indies” casi siempre soplan Alisios del Este, con direcciones entre los 75º a 105º y  una intensidad perfecta entre 13 y 25 nudos. Condiciones perfectas para avanzar de forma decidida hacia las Antillas menores.