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Está por aparecer un libro “blanco” con un decálogo de medidas cuya
finalidad es la de paliar los efectos que está teniendo la crisis
sobre la náutica de recreo. Entre ellas, se propuso la anulación
temporal del injusto impuesto de matriculación que SOLAMENTE se
cobra en España pues ningún otro país Europeo aplica esta abusiva
fiscalidad
Pero el
gobierno parece no estar de acuerdo en aprobar estas medidas pues en
el senado algún parlamentario respondió con estas esperpénticas
declaraciones…” Ustedes pretenden crear
un paraíso del lujo en España… bajando los impuestos del ocio y la
suntuosidad”. Y no harto de decir inconveniencias, el
mismo portavoz proponía sarcásticamente la posibilidad de rebajar
también los impuestos al caviar y al champán… Pero como los
disparates suelen venir de dos en dos, otra senadora del Grupo
Socialista Catalán bramaba que cómo se iba
a eliminar un impuesto para ayudar a los ricos a pasarse un veranito
tostadito con la paella en la playa…
Demagogia política
Es urgente que
estos políticos adopten una actitud seria y responsable frente al
grave problema que sufre el sector de la náutica de recreo. Los
barcos de recreo no son asunto de ricos ostentosos como algunos
pretenden hacerlo creer a la opinión pública. Muy al contrario, en
España la mayoría de los aficionados a la náutica de recreo tienen
un pequeño velero o barco de motor, para nada comparable con los
excepcionales "yates Marbellís", y con cuya afición genera una
economía de la que dependen miles de familias en nuestro país. Así
es, pues entre puestos de trabajo directos e indirectos la nautica
de recreo emplea a 115.000 trabajadores. Así de importante es este
sector que peligra debido entre otras razones a la falta de
perspectiva y lucidez de determinados responsables políticos.
Un sector que
tiene una importancia vital en la economía española, algo que
posiblemente haya pasado desapercibido en el Senado a sus señorías,
pues si el sector marítimo Español (Pesca + Contrucción naval +
Transporte marítimo + Nautica de Recreo + Resto de subsectores)
genera un valor añadido bruto de 26.245 millones de Euros, lo cual
representa un 3,2% del PIB, llegando al 7,2% si se tienen en cuenta
los efectos indirectos e inducidos (empresas que dependen y trabajan
para las industrias náuticas), y en términos globales emplea al 2,3%
de la población Española con 456.000 empleos, por encima de la
agricultura y ganadería juntas, o más del doble del que genera el
sector del automóvil que recibe ayudas sin pestañeos, como el plan
“prever”.
Y lo que
seguramente desconocen muchos aficionados, y con seguridad estos
políticos, es que de las diversas áreas de actividad del sector
marítimo, la náutica de recreo es con diferencia la más importante y
maltratada por el gobierno de España que simplemente parece
ignorarla.
Pues sepan
estos senadores irresponsables, que la náutica de recreo genera un
valor de producción de 4.664 millones de euros en nuestra economía
frente a 3.541 millones en la construcción naval, 2.861 en la pesca
o 2.415 en el sector del transporte. Economía de náutica de recreo y
bienestar, que no de ostentosidad y demás apelativos embusteros, y
que para desgracia de miles de familias, ya acumula un 70% de
pérdidas en valor de producción y anota a fecha de hoy abultadas
cifras de despidos.
Por todo ello,
con seguridad debiera ser reconsiderado en el senado la necesidad de
prescindir del injustificable impuesto de matriculación, único en
Europa.... Resulta una desgracia comprobar como tan serio asunto es
rechazado con vehemencia y sarcasmo por los responsables del
gobierno, que lejos de sensibilizarse con el clamor de todo un
colectivo que agrupa a más de 100.000 ciudadanos trabajadores,
prefirieren mofarse y hacer “gracias” culinarias poco originales y
desde luego, inoportunas.
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La
postura de ANEN (Asociación Nacional de Empresas Náuticas)
ANEN
manifestó su total desacuerdo frente al rechazo absoluto de
apoyar a la industria náutica por parte del Partido Socialista
Catalán y otros grupos parlamentarios. ANEN criticó duramente
esta actitud, ante el rechazo a la propuesta para suprimir el
impuesto de matriculaciones de las embarcaciones de recreo:
No se trata de favorecer sólo a unos pocos para la compra de
un barco, sino de estimular la demanda para que la industria
náutica española (en serio peligro de extinción por la crisis)
consiga mantener los 115.000 puestos de trabajo que genera; lo
que se persigue es el mismo efecto que con el Plan Prever del
Gobierno para el sector del automóvil
Con el apoyo de
la
Administración, al igual que ocurre con los países de nuestro
entorno, la industria náutica podría llegar a generar más de
300.000 empleos (650.000 en Italia y 350.000 en Francia)
El duro tratamiento fiscal que sufre la industria náutica en
España (el mayor de toda Europa) está provocando una acusada
pérdida del turismo náutico que se está desviando hacia otros
países de Europa, fundamentalmente Italia, Francia, Croacia y
Grecia.
En España el 80% de los barcos de recreo miden menos de
8 metros
de eslora, sus propietarios son personas de clase media.
ANEN
lleva meses planteando ante el gobierno, la grave situación
por la que atraviesa la industria náutica nacional, con una
caída de las ventas que se cifra en torno al 70 % en el primer
semestre del año.
A la
vista de las declaraciones realizadas por el PSOE, ha quedado
clara la posición de este grupo parlamentario, que lejos de
apoyar a la industria náutica para salvar no sólo los 115.000
empleos que genera este sector industrial, sino también la
productividad derivada de sus relaciones con los sectores de
turismo y servicios entre otros, ha rechazado debatir la
propuesta planteada en el Senado por el grupo popular.
Un país
con más de 4.000.000 de desempleados no puede permitirse que
sus representantes parlamentarios en el Senado menosprecien
la importancia que el sector náutico tiene en España, con
comentarios peyorativos sobre “la paella y las playas”.
En
España la industria náutica tiene todas las condiciones a su
favor para llegar a ser un sector industrial generador de
riqueza y de empleo. Actualmente esta industria genera 115.000
empleos y aporta 5.536 millones de euros al VAB (Valor Bruto
Añadido). Mantener estas cifras, que se podrían multiplicar
por tres si nos igualáramos a nuestros vecinos europeos,
depende de que el gobierno tome medidas como suspender
temporalmente el impuesto de matriculación, que en España
grava con un 12% (además del 16% de IVA) a los barcos de mas
de 8 metros de eslora para uso particular; y a los que tienen
más de 15 metros destinados al mercado de alquiler. Una
iniciativa que, sin duda, animaría a la demanda y con ello
potenciaría todo el engranaje que mueve detrás: la
construcción de barcos, su mantenimiento, seguros, industria
auxiliar, servicios que requieren los usuarios en puertos
deportivos, hoteles, etc.
En
países como Italia o Francia sus gobierno han visto claramente
la importancia del sector de la náutica de recreo en la
economía nacional y por eso han apoyado con medidas fiscales
favorable a su industria náutica que genera 650.000 y 350.000
empleos respectivamente.
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Medidas propuestas por el
Clúster Marítimo Español
El Clúster
Marítimo Español es una agrupación de empresas e instituciones
relacionadas con el mar, que pueden cooperar y beneficiarse del
aprovechamiento de sinergias y de importantes economías externas,
fusionando intereses, conocimientos y saber hacer.
El decálogo
propone las siguientes medidas que deberían permitir una salida de
la crisis más rápida:
1. Impulsar líneas de crédito, de avales y de sistemas de garantía
de cobro.
2. Eximir temporalmente de algunos impuestos como el de
matriculación y cuotas S. Social.
3. Mantener y mejorar la financiación de la I+D+i con préstamos sin
intereses.
4. Fortalecer los centros tecnológicos de referencia especializados
en el mar.
5. Mejorar los apoyos a la exportación y la internacionalización.
6. Invertir en formación de recursos humanos de calidad.
7. Promover grandes infraestructuras para facilitar el transporte
marítimo.
8. Crear un registro especial para buques de pesca acorde con la
Unión Europea.
9. Moderar la aplicación de tasas, como las portuarias.
10. Fomentar la adopción del concepto de responsabilidad social
corporativa.
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