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| | Marzo 2014 | | Náufrago durante más de un año | | |  | | | José Alvarenga, alcanzó las Islas Marshall tras 13 meses a la deriva por el Océano Pacífico desde México. Se trata de un pescador salvadoreño de 37 años que quedó sin motor en su pequeño barco de pesca mientras faenaba en aguas del pacífico mexicano.
Tantas desventuras tuvo que soportar que llegó a pensar en el suicidio. Al final la esperanza y el deseo de ver a su familia y a su hija, se impuso y tras meses y meses de lucha alcanzó las islas Marshall en donde fue
rescatado. Unas 7.000 millas a la deriva en las que pudo mantenerse con vida comienzo peces crudos y bebiendo el jugo de los peces.
"Hubo momentos en los que pensé en suicidarme, pero tuve miedo de hacerlo", pero después me despertaba y todo lo que veía era mar y aguas a mi alrededor. Sus padres ya lo daban por muerto, a pesar de lo cual su
madre confiaba en que siguiera con vida. Este hombre de mar salió a pescar tiburones un día a finales de 2012 con un amigo que murió de inanición al no poder asimilar el pescado crudo. Pasados unos pocos meses moría desnutrido y José tuvo que tirar su cuerpo por la borda.
El pequeño pesquero de 6 metros de eslora se topó con un arrecife en Ebon , tras el largo y penoso periplo, en este remoto atolón de las islas Marshall. El naufragó sobrevivió bebiendo sangre de tortugas y regogiendo todo el agua de lluvia que podía. Como alimentos utilizaba pájaros y algunos peces voladores que cogía con las manos. Lo más duro era cuando tenía que beberse su orina durante 3 meses en los que nunca llovió.
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